¿Cómo saber que tu perro está enojado contigo?
¿Tu perro se comporta distante cuando intentas hacerle cosquillas en la barriga? ¿Sientes que algo extraño está sucediendo entre ambos? Si tu amigo canino está actuando de manera hostil contigo, es posible que esté enojado.
Si bien los especialistas dicen que los canes pueden sentir miedo, ansiedad e incomodidad, se cree que no tienen la capacidad de asignar un motivo a una emoción, por lo que el tuyo podría estar enojado, aunque quizá no exactamente contigo.
Si realmente quieres saber si tu perro está molestos por alguna razón, aquí te compartimos algunas señales o avisos que podrían darte la respuesta.
Se aleja de ti
¿Te sientes ignorado? Si su perro mantiene la distancia o no parece interesado en apapachos o premios, quizá esté alterado por algo. Lo más probable es que esté cansado o simplemente no se sienta bien.
Ellos tratan de ocultar el dolor y la incomodidad, por lo que evitarte puede ser solo una forma de ocultar lo mal que se siente y no necesariamente que está enojado.
Un cambio en su actitud también podría ser un signo de depresión, como alguna pérdida —de un dueño o de otro perro— o la llegada de un nuevo bebé a casa.
Se chupa demasiado
¿Tu perro está enojado contigo o más bien está angustiado? Obsérvalo bien. ¿Se lame la nariz y los labios demasiado sin que haya comida cerca?
Una situación habitual en la que un perro saliva demasiado es cuando está siendo abrazados por niños o extraños. Si es el caso, intenta mediar la interacción entre el can y los menores.
Te ve de reojo
Si notas que tu cachorro te mira de costado, es posible que te esté tratando de transmitir que está molesto por algo que hiciste o por algo en general.
Este síntoma también suele indicar que está ansioso. Si es el caso, y crees que tu perro está enojado contigo, puedes intentar calmarlo ofreciéndole un premio, hablándole con calma o simplemente dándole espacio.
Tiene las orejas caídas
Una de las maneras más evidente en que un can expresa emociones es a través del lenguaje corporal. Si notas que sus orejas están aplanadas, su cabeza baja o tiene el hocico cerrado y los labios apretados, podría ser que tu perro está enojado contigo.
Pero no te preocupes demasiado por eso, lo más probable es que no te guarde rencor. Un cariño detrás de las orejas podría ser todo lo que se necesita para un perdón rápido y total.
Lee también: Las cosas más extrañas que hacen los perros todo el tiempo
Bosteza demasiado
Al contrario de lo que podría pensarse, los grandes bostezos no significan que tu perro esté aburrido de mirar la tele a tu lado; en realidad, es una señal de que está estresado, molesto y/o agitado. Según los especialistas, es importante prestar atención a esta señal e inmediatamente tratar de cambiar la situación con refuerzos positivos.
No te muestra afecto
Si tu perro solía babear sobre ti, y de repente ya no lo hace, el cambio puede ser una señal de que no se siente bien.
Los perros intentan ocultar la incomodidad, así que uno comienza a actuar de manera diferente con su humano favorito podría significar que trata de ocultar una dolencia o lesión. Un cambio dramático en el comportamiento como este podría justificar una visita al veterinario.
Se queda tieso
Cuando un perro está muy molesto, a menudo se pone rígido, según explican los especialistas en comportamiento de mascotas. Es casi como si te estuviera diciendo: “¡acércate, te reto!”.
Cuando esto suceda, dale su espacio, o puede sentir que tiene que defenderlo, lo que, en algunos casos, puede provocar que la cosa escale al nivel de las mordidas. Los perros más pequeños suelen ser más susceptibles a esto, aunque también debes tener cuidado con los grandes.
No te hace caso
¿Quieres saber si tu perro está enojado contigo? Ve qué tanto te hace caso. La terquedad es absolutamente un signo de ira o incomodidad en un can.
Si tu perro es capaz de sentarse, quedarse quieto y darse la vuelta, y de la nada se niega, intenta pensar en tu comportamiento propio. Tu amigo percibe cuando estás estresado o ansioso, por lo que solo podría estar reaccionando al ambiente general de tu hogar.
Si este fuera el caso, intenta primero practicar yoga y/o ejercicios relajantes antes de ayudar a tu perro, y verás como él o ella poco a poco irá reaccionando a tu nueva actitud.